Gavroche
Gavroche - http://www.ratebeer.com/beer/gavroche/7324/
Aunque cada vez menos, todavía quedan birras de super francesas que no he probado y que me voy llevando cada vez que pasamos por esas tierras. La última, esta Gravroche de la cervecera St. Sylvestre, una bière de garde (estilo que ya pienso que es un genérico para una ale francesa).
Servida tiene una pinta bastante maja, entre granate así cobriza y marrón, ligeramente turbia y con una espuma de lo más generosa, que se quería salir al abrirla, y que deja una enorme corona cremosa, tipo Orval.
Es curioso, al olerla pensé en algo en lo que nunca me fijo incluso cuando parece ser que es muy obvio, regaliz. Me pareció acaramelada, pero de una forma que no terminaba de ser tan dulce, sino más tirando a ligeramente ácida, y así... madura? Al airearse de hecho me pareció que se volvía más afrutada, muy tipo dubbel belga. Me hizo pensar en higos, y seguía teniendo un rollito ácido al final. La verdad es que tenía un olor muy completo, quizá pintaba pelín empalagosa para mi.
Y así me pareció, dulce tirando a algo empalagosa, sobretodo para mi que me he desbelguizado con el tiempo 😆 de nuevo se me hizo muy afrutada, pero así a fruta muy madura, como a pera pasada. Seguía siendo algo acaramelada, quizá tipo toffee, y al final me parecía que se dejaba notar un regusto entre ácido y amargo, muy ligero, pero que equilibraba un poquillo lo anterior.
Fue curiosilla, pues al principio no me pareció particularmente sabrosa, luego me empalagó un poco, aunque mejorase otra vez con la segunda mitad que use para acompañar la cena. De sus 8.5º ni rastro, en ese aspecto estaba muy conseguida.
Me pareció una buena birra, aunque no terminó de encajar en mis gustos de últimanente, pues se me hizo algo cansina. Eso si, el precio creo que era competitivo: alrededor de 1.50€ en un super francés.
Gayant La Goudale
Gayant La Goudale - http://www.ratebeer.com/beer/gayant-la-goudale/9157/
Una de las cervezas que compré en los alrededores de Colmar fue esta bière de garde francesa (estilo que, la verdad, no sé muy bien qué características tiene... parece un poco popurrí, aunque he probado pocas), de la cervecera Les Brasseurs De Gayant.
De color naranja, medio turbia y con una espuma bastante maja, asomado el hocico llegaba poco, aunque parecía agradable, dulce tipo afrutadilla como una blonde belga.
El trago me sorprendió para bien, dulce y afrutada, con ese que siempre me ha recordado como a piel de naranja o algo así, y que tengo muy asociado a mis primeras tripel y blode belgas. Cuando parecía que iba a ser empalagosa, venía un calorcillo en la garganta, agradable, aunque quizá llegaba a ser un poco alcohólica (sus 7.2º, sin ser nada demasiado loco, no son tampoco desdeñables).
Con los tragos me aburrió un poquín, pero aun así me pareció, cómo decirlo... sólida. Quizá es porque hasta ahora las birras francesas me han parecido normalitas, pero la verdad es qeu se me hizo una buena birra que, sin ser nada muy especial, hizo el trababajo a precio moderado: la compré en un L'Eclerc a unos 3€.
Grimbergen Blanche
Grimbergen Blanche - http://www.ratebeer.com/beer/grimbergen-blanche/75071/
Visitando hace un par de años a mi amigo Rubén en Antibes me llamó la atención la cantidad de franceses que, a eso de las 11:30, estaban tomándose esta birra como aperitivo. Desde entonces había tenido curiosidad por probar esta cerveza medio belga medio francesa (Grimbergen no me gusta especialmente, pero es una de las marcas más famosas).
Esta witbier (ya sabéis, la forma belga de hacer el "zumo de trigo" 😀 ) lucía naranja con esa característica turbidez blanquecina del estilo, aunque algo más oscura de lo normal.
El olor estaba bastante bien, quizá pelín dulzón, pero agradable. Bastante cítrico y especiado (tipo trigo belga, con eso que recuerda a algo mentolado, clavo que dicen los que saben), con un toquecillo que a mi me recordó a fresas.
El trago en cambio no me sedujo tanto. Vuelve a recordar al estilo, con esa mezcla cítrica y especiada, con el rollo cereales o miga de pan del trigo, y un toque así ácido, pero el ácido del trigo, ese suave que me recuerda al té rojo.
Pero no sé, era más dulce de lo que a mi me gusta, un dulce algo anodino, no me terminó de encantar. Tenía un final algo alcohólico que compensaba para bien, aunque me soprendió, pues tiene 6º. Curiosamente, la segunda mitad, acompañada de una ensalada de rúcula (siempre me gusta cómo le queda al trigo), mejoró bastante, ganando algo de fuerza ese final.
Al final la verdad es que me pareció una buena birra, aunque no la tomaría a palo seco por pelín dulzona. Quizá, puestos a tirar por una witbier barata, quizá iría a la clásica Hoegaarden, que tiene menos alcohol y un precio similar en un Alcampo, quizá menor: creo que ésta salió a unos 1.25€.